Los infaltables dipolos Wimdom para 80 y 40 metros, el moño para 15 y 20 metros y un par de dipolos de 80 metros fueron esta vez complementados con dos direccionales para HF; una Palombo para 20, 15 y 10 metros y una reformada de 10 a 6 metros. Para el montaje de las antenas, como ya mencioné, llevamos tres tramos de torre reticulada de 3 metros c/u, con sus riendas , amarres y estacas, y tres mástiles telescópicos de 3 metros.
Por cualquier "sorpresa" o imprevisto que sucediera, cada móvil contaba con su equipos de VHF, por lo que no agregamos más a la lista, aunque sí una direccional de 3 elementos.
Con respecto a la provisión de energía para los equipos, llevamos varias fuentes, un par de Zurich de 27 Amperes, una Daiwa de 60 amperes y una switching de PC.
Para resguardar los equipos y operadores de la intemperie, habíamos previsto llevar la carpa-comedor estructural, que casi siempre llevamos a las actividades, mas una carpa canadiense y otra pequeña tipo iglú. Además de una gran lona de cobertura de pvc, que podría destinarse a tapar equipos, proteger o diversos usos más.
Las carpas, no estaban previstas de ser usadas para dormir, ya que para ello había algunas plazas disponibles en los departamentos de Mar de Ajó, y el resto, dormiríamos en los vehículos, cuando el cansancio nos ganara o la propagación y los corresponsales dejaran de escucharse.
Los que dormiríamos en el predio del faro, procuramos tener algunos elementos de confort para esas noches, por lo que Juan Carlos trajo tres colchonetas y frazadas como para dormir dentro de la caja de la "Porota" con su familia ( incluído "Tronquito"...), y suficientes placas de telgopor para aislar la lona del frío exterior. Yo personalmente cargué una colchoneta inflable y el inflador electrico y la bolsa de dormir ya que pensaba usar mi camioneta como dormitorio. Fabián también trajo una bolsa de dormir, aunque nadie supo dónde pensaba instalrla.
También destinado fundamentalmente a los equipos y operadores, cargamos unos caballetes, tablas, sillas, sillones, cajones, bancos y reposeras.
No hubo necesidad de llevar parrilla para el asado, ya que habíamos visto un sector con lo indispensable para cocinar, inclusive un horno a leña.
Respecto de la comida, solo previmos de tener suficiente bebida y algunas galletitas y bizcochos para entretenernos; el resto, debería ser traído desde Mar de Ajó, ya que no se justificaba llevarlo desde Avellaneneda.
Indispensables en todas las salidas, los equipos materos, con las garrafas y termos.
Si bien sabíamos que nos proveerian de energía eléctrica, no sabíamos dónde estaba la toma mas cercana, por lo que incluímos varios alargues de 50, 30 y 20 metros, de generosa sección para evitar caídas de tensión, además de algunos mas cortos para la distribución, triples, zapatillas, adaptadores, cinta aisladora y portátiles para iluminar los sectores a la noche.
Además, previendo interrupciones o fallos de la energía de 220 Volts, preparamos una batería de gel de 12 Volts 100 Amperes y un pequeño grupo electrógeno de 750 Watts, suficiente para alimentar un par equipos y algunas luminarias para la operación.
La temperatura y el clima de esas noches eran sin duda, la mayor preocupación de todos, por lo que personalmente llevé un pequeño caloventor eléctrico, el cual fué innecesario ya que Fabián cargó una garrafa de 15 Kg con una pantalla infrarroja que realmente dejó a todos más que conformes, al punto en que se hizo necesario apagarla, o sacarse parte del abrigo dentro de la carpa.
Como de costumbre una gran cantidad de implementos llenaron cajones con accesorios y repuestos que no parecen importantes hasta el momento en que uno los necesita o se produce un inconveniente o imprevisto. Entre ellos podemos mencionar los alargues, conectores y líneas de transmisión de RF, balunes, centros de dipolos y aisladores, cable unipolar, chicotes, cocodrilos, relojes de mesa, auriculares, sogas, cuerdas e hilos de diferentes diámetros y largos, herramientas como testers, soldadores y estaño, pinzas, destornilladores y la infaltable cinta aisladora.
Por último, nos preparamos nosotros, los operadores, quienes desde hace tiempo estábamos ansiosos por concretar ésta, nuestra primera activación de un faro. Los preparativos fueron también variados; desde la ropa, algunos medicamentos o efectos personales, anotadores y lapiceras, y algo muy importante... tenedor y cuchillo personales para el asado.
Para comenzar a hablar de los preparativos de la una activación de faro, teníamos primero que eligir uno... Considerando que varios de los integrantes del grupo tienen casas de veraneo en el Partido de la Costa, el faro Punta Médanos, situado a pocos kilómetros de la ciudad de Mar de Ajó, se presentaba como la mejor alternativa.
Nos pusimos en contacto con integrantes LU6DM, Radio Club Mar de Ajó, para solicitar su apoyo en la tramitación de los permisos, que fueron enviados via e-mail y entregados al personal del faro en persona. De inmediato ya teníamos la autorización verbal e informal de la posibilidad de realizar la activación para el Fin de Semana Internacional de Los Faros y Buques Baliza, y luego de algunas semanas de espera, recibimos la notificación "oficial" de parte de Hidrografía Naval, confirmando dicha autorización.
Las reuniones al respecto de los equipos, antenas, móviles y otros elementos a utilizar, definiciones sobre la forma de transladarnos y pernoctar en el predio del faro, y los preparativos de algunos elementos fueron sucediéndose mientras tanto, para definir y, por qué no también, para ir sacándonos la ansiedad entre nosotros.
Ya todos nos sentíamos seguros de la operativa en las salidas de campo, pero ésta era nuestra primera experiencia con un faro, ocasión que no queríamos opacar con imprevistos ni complicaciones; las previsiones, por ese motivo, llegaron a ser, en algunos casos, sobredimensionadas.
El colega de Mar de Ajó, LU3DO, Jorge Alvarez, nos mandó algunas fotos del lugar que se nos había asignado para la activación; con ellas, y las referencias de quienes ya habían visitado el faro en ocasión de vacaciones o turismo, teníamos noción exacta de dónde debíamos instalarnos.
La operación estaría centrada en las bandas de HF, ya que aunque hay gran cantidad de aficionados en la zona, se descuenta que practicamente todos ya han confirmado este faro.
Con respecto a los tranceptores, se llevaron 4 equipos de HF; un Kenwood TS 570, un TS 440, un TS 680 y un Yaesu FT 840. Como accesorios indispensables para los equipos sin acoplador automático, llevamos un MFJ 945E y un 942E y el Yaesu AT 707.
También se preparó una PC Pentium III con la interface para transmitir y recibir modos digitales, con los cásicos programas multimodos, PSK y SSTV.
El lugar era sobre el paredón que rodea el predio en el lateral que dá a la playa; obviamente, dentro del predio, lo que no es poco, considerando la presencia de los equipos, objetos de valor y algunos niños inclusive, que no merecen ser expuestos ante posibles hechos de robo.
La posibilidad de ingresar con los vehículos hasta allí, nos facilitó la previsión de algunos detalles, como la posibilidad de contar con refugio en caso de lluvia o frío, tan comunes para nosotros en esta época, o con las baterías de los mismos ante un corte, fallo o ausencia de energía eléctrica.
Los móviles que nos llevaron hasta el faro fueron los propios; un Fiat Duna ("Móvil Rojo") de LW5DUS, LW7DFD, LU4EML y LU9DSA, la "Tota", una pick-up Chevrolet de LU2AHB, un VW Senda de LU1DHL y LW5ECM, la "Porota", una Ford F-100 de LW3DJC, LU8DIR y LU3DCV y la "Zulma", una Peugeot Partner de LU9DPD compartida con LW8DZP, también llamada "la móvil presidencial"
LU7EO Avellaneda Radio Club
Los vehículos transportarían, además de los pasajeros con sus elementos personales y ropa; algo de comida y los equipos y accesorios.
Juan Carlos debió cargar con la parte más incómoda y trabajosa del traslado, dado que la única con el portaequipajes adecuado para transportar los 3 tramos de torre, 3 mástiles y las antenas direccionales que desarmadas medían más de 5 metros de largo, era la "Porota".