Se considera inundación al flujo o a la invasión de agua por exceso de escurrimientos superficiales o por acumulación en terrenos planos, ocasionada por falta o insuficiencia de drenaje tanto natural como artificial.

Las inundaciones generalmente son consecuencia directa de otros fenómenos hidrometeorológicos y, en ocasiones, son inducidas con fines técnicos y de beneficio económico-social. Por ejemplo, desde el punto de vista técnico, las extracciones de control que se realizan a las presas de almacenamiento cuando presentan niveles extraordinarios, con el objeto de mantener la seguridad de la cortina y obras conexas.

En cuanto a la parte de beneficio económico-social, la inundación inducida en áreas no productivas se realiza para evitar o disminuir los daños en centros de alto desarrollo urbano, industrial o agropecuario y también con el fin de recargar los depósitos de agua subterráneos.

En general, la magnitud de una inundación provocada por calamidades de origen hidrometeorológico, depende de la intensidad de las lluvias, de su distribución en el espacio y tiempo, del tamaño de las cuencas hidrológicas afectadas, así como de las características del suelo y del drenaje natural o artificial de las cuencas.

 

QUE HACER EN UNA INUNDACION

Las inundaciones se presentan con gran frecuencia en diferentes regiones del territorio nacional, algunas se desarrollan durante varios días pero otras pueden ser violentas e incontenibles en pocos minutos. El agua se desborda causando sistemas de drenaje naturales que pueden arrastrar piedras, lodo, troncos de árboles y otros escombros. Los flujos de lodo son un peligro provocado por esta calamidad.

Por lo anterior, y sobre todo si se vive en un área baja y plana cercana a un río, al mar, o tierra abajo de una presa, es necesario estar preparados para enfrentar las posibles inundaciones y responder adecuadamente.

Salvo las inundaciones intempestivas que se pudieran presentar en las riberas de los ríos o en las zonas aledañas a las presas, las demás generalmente tienen un proceso de generación que permite tomar medidas suficientes para evitar o aminorar los daños que causan a la población. Asimismo, con frecuencia la inundación es una calamidad que se encadena a un huracán, cuyas lluvias torrenciales, aunadas a una ubicación inadecuada de la vivienda, propician los desastres.

Algunas de las medidas siguientes coinciden con las citadas para antes, durante y después de un huracán, sin embargo, se mencionan también otras, particularmente referidas a las inundaciones.

ANTES

Cómo prepararse con anticipación

Evite las áreas comúnmente sujetas a avenidas, o a inundaciones repentinas, no construya en terrenos afectables por desbordamiento de una presa, ni en las riberas de los ríos u otros cauces de agua, aunque estén secos.

Si usted vive en zonas donde ya han ocurrido inundaciones:

Establezca las rutas de salida más rápidas desde su casa o lugar de trabajo, hacia los lugares altos que se hayan previsto como refugios temporales.

En época de lluvias:

Procure no dejar solos a los niños, si lo hace infórmelo a sus vecinos.

Mantenga una reserva de agua potable y alimentos que no se descomponen.

Empaque sus documentos personales: acta de nacimiento, escrituras, documentos agrarios, cartillas, etc., en bolsas de plástico bien cerradas y en morrales o mochilas que pueda cargar de tal forma que le dejen libre los brazos y manos.

Tenga disponible un radio portátil, lámparas de pilas y un botiquín de primeros auxilios.

Mantenga el tanque de su vehículo lleno de combustible.

Si se avecina una inundación:

Esté pendiente de los avisos de alerta y manténgase informado; esto lo ayudará a prepararse en caso de una emergencia,

Limpie la azotea y sus desagües, así como la calle y sus atarjeas, para que no se tapen con la basura.

Siga las indicaciones de las autoridades y prepárese para evacuar en caso necesario.

DURANTE

Ante todo, conserve la calma y tranquilice a sus familiares. Una persona alterada puede cometer muchos errores.

Esté pendiente de los avisos de las autoridades a través de su radio portátil.

Prepárese para trasladarse al lugar o refugio temporal previsto, si esto llega a ser necesario.

Si decide quedarse en su casa:

Conserve la calma.

Tenga a la mano los artículos de emergencia mencionados.

Mantenga su radio de pilas encendido para recibir información e instrucciones de fuentes oficiales.

Lleve al lugar previsto sus animales y equipo de trabajo.

Tenga a la mano ropa albrigadora e impermeable.

Cubra con bolsas de plástico aparatos u objetos que puedan dañarse o romperse con el agua.

Limpie la azotea, desagües, canales y coladeras y barra la calle destapando las atarjeas.

Llene el tanque de gasolina de su vehículo y asegúrese del buen estado de su batería.

Selle con mezcla de cemento la tapa de su pozo o aljibe para tener agua de reserva no contaminada.

En caso de evacuación:

Desconecte los servicios de luz y de gas.

Cerciórese de que su casa quede bien cerrada.

Siga las instrucciones de las autoridades, o bien:

Diríjase de inmediato a los lugares o refugios temporales previstos.

Si se traslada en algún vehículo y éste quedara atrapado, salga de él y busque un refugio seguro.

Suba al lugar más alto posible y espere a ser rescatado

Evite cruzar ríos.

Use los zapatos más cerrados que tenga.

Retírese de casas, árboles y postes.

Evite caminar por zonas inundadas; considere que puede ser golpeado por el arrastre de árboles, piedras o animales muertos.

DESPUES

Conserve la calma.

Siga las instrucciones transmitidas por las autoridades a través de los medios de comunicación.

Reporte inmediatamente los heridos a los servicios de emergencia,

Cuide que sus alimentos estén limpios, no coma nada crudo ni de procedencia dudosa.

Beba el agua potable que almacenó o hierva la que va a tomar.

Use los zapatos más cerrados que tenga.

Limpie perfectamente cualquier derrame de medicinas, sustancias tóxicas o inflamables.

Revise cuidadosamente su casa para cerciorarse de que no hay peligro.

Si su casa no sufrió daños permanezca ahí.

Mantenga desconectados el gas, la luz y el agua hasta asegurarse de que no hay fugas ni peligro de corto circuito.

Cerciórese de que sus aparatos eléctricos estén secos antes de conectarlos.

No divulgue ni haga caso de rumores.

Unicamente use el teléfono para emergencias.

Colabore con sus vecinos para reparar los daños.

En caso necesario solicite ayuda a las brigadas de auxilio o a las autoridades más cercanas.

Si su vivienda está en la zona afectada, podrá regresar a ella cuando las autoridades lo indiquen.

Desaloje el agua estancada para evitar plagas de mosquitos.

Si tiene que salir:

Use los zapatos más cerrados que tenga.

Manténgase alejado de las áreas de desastre.

Evite tocar o pisar cables eléctricos,

Retírese de casas, árboles y postes en peligro de caer.

Recuerde, más vale prevenir...

Si vive en zonas con tales riesgos, ponga atención a los avisos o alertas de inundación, ya que lo previenen de los peligros que esta calamidad trae consigo y orientan sus acciones para proteger sus vidas.