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Mario
llevó su “Durango”, Ricardo y Néstor llevaron cada uno
su Jeep, gracias a los cuales pudimos subir hasta arriba porque
con el mal camino sin ellos no hubiéramos podido llegar cerca de las
casetas, habiendo tenido que
continuar a pie un trecho más largo.
Todo
el trayecto nos encontramos con un día cubierto por la niebla, lluvioso
y en algunos momentos hasta un poco de nieve y así continuó todo el
tiempo que estuvimos arriba, |
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pero
esto no nos impidió trabajar y divertirnos, de manera que
Jean Pierre se subió a la torre para colocar todas las antenas
y abajo haciendo
las mediciones se encontraban Mario y Ray,
preparando los equipos y subiendo las antenas
estaban Néstor, Ricardo,
Felipe, Beto y nuestro Presidente; todo esto desde luego bajo la
continua llovizna.
Se
instalaron las antenas y se reanudó el servicio de los siguientes
equipos: |
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Repetidor
146.940,
Repetidor
438.200
Nodo
packet 145.010
Nodo
APRS 144.390, graciosa
aportación de Martín XE1-OGT
Beacon
6 mts. 50.023 |
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Quedando
pendiente para la próxima ocasión de resanar un poco sobre el marco de
la puerta pues hay unos hoyos
por los que entran las ratas y pueden roer los cables de los
equipos; aplanar la caseta que se quedó en obra negra y probablemente
la instalación de una lámpara fluorescente para tener una mejor
luminosidad.
La
limpieza del local técnico corrió a cargo de |
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Felipe
y del Presidente, que lo dejaron albeando de limpio. La sesión de fotos
estuvo a cargo de Néstor que hasta el tripié llevó y de Odette que
hizo cerca de 100 para poder escoger. Odette conociendo
ya el tiempo que pasaríamos allá arriba y nuestro Presidente
Carlitos seguramente suponiéndolo llevaron respectivamente
las botanas, refrescos, café, fruta y las tortas gentilmente
preparadas y enviadas por la “esposita”. |
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Las
esposas fuimos para asegurarnos de que nuestros esposos y el resto del
grupo regresaran porque de repente les dá por quedarse allá arriba y
ponen en movilización a todo el mundo.
Al
terminar nuestro día en
Altzomoni y ya cerca de las 5 de la tarde, vino lo mejor pues bajamos
a comer al
restaurante desde luego español que se encuentra
sobre la carretera, lo que cada quien escogió: una rica paella,
fabada, |
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chistorra,
ternera al horno, etc. y al terminar ya nos dirigimos hacia la ciudad de
México, todos muy contentos porque ya “habíamos dejado funcionando
los equipos”.
Sonia
XE1-YSO
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