Y todo esto ¿a santo de que?...
Considerando todas las diferentes facetas desde las cuales un indivíduo puede practicar la radioafición, se hace patente el hecho de que es prácticamente imposible abarcarlo todo en profundidad.
Así los aficionados con un interés común terminan agrupándose en diferentes facciones, mas centradas o especializadas en alguna modalidad concreta de radioafición.
Cada uno desde su posicion participa de algun modo aportando algo a esta actividad. Y entre todos hacemos de la radioafición lo que es.
Tengo la firme convicción de que hay una gran cantidad de compañeros que dedican parte de su tiempo a la experimentación, investigando las posibilidades de circuitos, antenas, computadores y materiales diversos. Buscando una utilidad directa en relación con el mundo de la radio.
Y a menudo es una actividad que se realiza en solitario, o que tal vez no trasciende mas allá del círculo mas inmediato de colegas. Tal vez no consideremos nuestro trabajo lo suficientemente importante o riguroso como para enviar un articulo a una revista para su publicación. En numerosas ocasiones he leido o escuchado quejas veladas acerca del excesivo tecnicismo en las publicaciones de radioafición. Por otra parte tambien están los que opinan que, al menos en España, las publicaciones de radioaficionados sufren una perenne sequía de artículos técnicos.


Tal vez todos estén en lo cierto, y tan solo son diferentes puntos de vista acerca de una misma realidad.
Mi postura personal al respecto comienza por considerar lo que somos como radioaficionados, o lo que deberíamos ser. Opino que el término mismo "radioaficionado", por esas curiosidades que a veces tiene el lenguaje, puede transmitir una visión poco acertada acerca de la actividad que practicamos.


La "radioafición" desde luego es una actividad que está muy lejos de ser una mera afición o divertimento. Tal vez si reemplazásemos el término "radioaficionado" por otro mas al uso como "radiotécnico aficionado" se disiparían algunos conceptos mas o menos confusos.
Entre todos llevamos a cabo una importante actividad científica, aunque probablemente no siempre tengamos conciencia de ello. Nuestros laboratorios son a menudo modestos. Tan modestos como un rinconcito de una estantería, al que con optimismo llamamos cuarto de radio. El presupuesto para nuestros "programas" de investigación y equipamiento sale de nuestro bolsillo. Y si esto no basta, ademas pagamos una importante suma al Estado por todo esto que hacemos.
¿Ciencia o mero divertimento?. Propongo que la ciencia sea divertida, y que si nos divertimos, ese tiempo de placer sea provechoso. Que el tiempo, esfuerzo, ilusiones y también dinero que dedicamos a la radioafición no sea inútil.


Para aquellos que no lo sepan, pongo de ejemplo a los astrónomos aficionados. Con su incesante actividad a lo largo del mundo constituyen un pilar necesario en la astronomía de hoy en día. Sorprende que con medios tan modestos como sus pequeños telescopios y artilugios (¿nos suena eso de algo?) realizen hallazgos tan importantes y sin los cuales la ciencia astronómica sin duda estaría un poco coja. Valga como ejemplo los últimos cometas que nos han visitado hace unos años, ¿se acuerdan de sus nombres?. Son los nombres de sus descubridores. Los nombres de alguos de los muchos aficionados a la astronomía que dedican su tiempo libre a la investigación del cosmos. Cargan sus telescopios en el automóvil y suben a lugares altos y despejados en donde montan sus cachivaches para practicar con ilusión aquello que les apasiona. Casi siempre robandole tiempo a la familia y al descanso. Prácticamente somos almas gemelas.


Mi modesta aportación, mi granito de arena a la radioafición es esto que ustedes ven. Compartir nuestras experiencias, éxitos o fracasos, aprovechando una herramienta de difusión e intercambio de información tan potente como es internet, y animar a los reacios a zambullirse de lleno en la experimentación o "cacharreo". Atraer a los indecisos con proyectos sencillos y atracivos. Cuando se saborea la satisfación del primer éxito y podemos decir: "Yo lo hice...", ya resulta dificil volverse atrás.
Como alguien dijo una vez: "El viaje mas largo y el mas corto comienzan de la misma manera: dando un paso". Pensemos que nadie nace experto, todo lo vamos aprendiendo y es mas fácil aprender si comenzamos por las cosas sencillas.
©J.Moldes - EB1HBK - Orense - 2002


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